Ha muerto a los 89 años, la italiana Maria Teresa de Filippis la primera mujer piloto que participó en la Fórmula 1 moderna, toda una leyenda que dejó de existir el pasado sabado cerca de Bergamo.
La legendaria mujer italiana tenía 32 años cuando debuto en 1958 en la máxima categoría calificándose para tres Grand Prix en aquel año, de los cuales solo en Bélgica logro terminar en la 10ma., antes había fallado en calificar a bordo de su Maserati 250F en Mónaco y nuevamente volvío a fallar en lograr entrar en la grilla a finales de ese 1958 para Porsche.
Tenía tan solo 22 años cuando inicio su carrera en la famosa Salerno-Cava dei Tirreni, tras semanas de estar practicando en la Amalfi Coast, fue todo un éxito, de Filippis al volante de un Fiat 500 ganando su categoría y terminando segunda en el intervalo. La Salerno-Cava marco el inicio en su carrera deportiva, probándole a sus hermanos que si tenía madera para las carreras.
Su llegada a la Fórmula fue en una época ya distante donde más importaba el piloto que el monoplaza que conducían, solía contar sus anécdotas de cuando coincidió con maestros de la talla de Musso, Fangio, Brooks, Ascari, Behra, de como compartían mucho y viajaban juntos en un vehículo a las carreras, y de como Fangio la tomo bajo sus alas mostrándole los secretos del deporte, no tuvo problema alguno en competir, a pesar que sus colegas masculinos tuvieron cierta duda al principio, únicamente en Francia se topo con el rechazo del director de carrera quién despectivamente le dijo que el único casco que una mujer debería usar es aquel en el salón de belleza.
Pero desgraciadamente su carrera tuvo un inesperado giro con la trágica muerte de Behra, el dueño de su equipo a finales de ese año en la AVUS, mucho amigos murieron en aquella época, pero el que más le toco duro fue Behra, ya que el monoplaza en el que se mató era el que ella misma debió haber estado conduciendo en aquel fin de semana; Jean Behra llegó a la carrera sin piloto y le dijo a De Filippis que condujera pero esta le respondió que sería ridículo si ella condujera en su monoplaza y dejarlo a él fuera de la acción, ve y corre tu monoplaza que es tuyo, luego en la radio escucha que esta muerto, a partir de ese incidente decidió retirarse.
Tras casarse e iniciar una familia, de Filippis regreso a la arena del motor después de aceptar una invitación de unirse al Club Internationale des Anciens Pilotes de Grand Prix F1 para pilotos retirados, club del cual fue vice presidenta en 1997 y luego presidenta honoraria en el siglo 21, su gran mérito fue haber sido la primera mujer en competir en la Fórmula 1 y abrirle la puerta a otras cuatro como Lella Lombardi, Divina Galica, Desiré Wilson y Giovanna Amati como pilotos en la máxima categoría y no como pilotos de pruebas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario