Grosjean tuvo la oportunidad de volver a ponerse al mando de un F1, todavía esta fijo en la retina el recuerdo de aquel accidente en el 2020 en Bahrein donde dramáticamente se estrello en las barreras y el monoplaza prendió en fuego dejando con quemaduras en ambas manos.
Hoy gracias a una iniciativa de Haas, tuvo la oportunidad de volver a la pista formando parte del evento TPC (Pruebas de Autos Previos).
Temprano el Viernes en Mugello, Florencia en donde tuvo lugar el Grand Prix de la Toscana que Grosjean salio a pista en el VF23 para rodar, el Francés llevaba un casco diseñado por sus hijo para que lo portara en Abu Dhabi en el 2020 donde fue su última carrera.
Después tomo lugar el conductor y ex-piloto James Hinchcliffe en el mismo VF23 como parte del evento, en donde estuvieron el directo Ayao Komatsu en su rol de ingeniero de Grosjean.
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